Para pasar un buen fin de semana, descansar y vivir en plena naturaleza puedes visitar:
Fontaneda, un pequeño pueblo de los valles de Andorra que ha sabido mantener aquel clima acogedor que tenían los pueblos de los valles pirenaicos.
Un pueblecito donde su gente se ha dedicado desde siempre a la agricultura. Envuelto en prados y bosques, huye de la imagen cosmopolita y comercial de la Andorra moderna.
Cal Bou Bou ha recuperado los antiguos edificios de uso agrícola que se han rehabilitado para ser utilizados como residencia de turismo rural, conservando al máximo las estructuras arquitectónicas tradicionales y dotando a los alojamientos de toda la comodidad de los tiempos modernos. Tienen un centro de equitación donde son criados caballos de la raza Halflingers-Tirol. Para ver las casas y el resort pinchar aquí:
Cal Bou Bou ha recuperado los antiguos edificios de uso agrícola que se han rehabilitado para ser utilizados como residencia de turismo rural, conservando al máximo las estructuras arquitectónicas tradicionales y dotando a los alojamientos de toda la comodidad de los tiempos modernos. Tienen un centro de equitación donde son criados caballos de la raza Halflingers-Tirol. Para ver las casas y el resort pinchar aquí:
Todas tienen 1 ó 2 dormitorios dobles y cuarto de baño con bañera de hidromasaje. La zona de estar-comedor incluye soporte para iPod, TV de pantalla plana y reproductor de CD y DVD. También disponen de zona de cocina totalmente equipada y lavadora.
Hay un supermercado en el Punt de Trobada, en la carretera principal con dirección a la frontera española, a unos 15 minutos en coche.
Los huéspedes pueden practicar una amplia gama de actividades al aire libre en los alrededores como ciclismo, senderismo y equitación. El complejo también cuenta con parque infantil y ofrece servicio de guardería.
Andorra La Vella está a 12,5 km.