De vez en cuando encontramos fotos que nos gustan y terminan llevándonos a un blog que entra del tirón en nuestra lista de lecturas.
Ante nosotros se abre un abanico de posibilidades para utilizar y sacar provecho de esas ideas.
En este caso con varias tintas, sellos especiales, rollos de papel higiénico, utensilios de cocina, los plásticos con burbujitas, tubérculos y frutas, podemos personalizar una tela que usaremos como manteles, servilletas, paños, pañuelos, envoltorios, lienzos para enmarcar, decoración...
¡Un mundo lleno de posibilidades en un trozo de tela!
Los mejores tejidos son los naturales como el algodón, lino, seda, lona, arpillera. También se pueden estampar tejidos sintéticos pero la tinta tenderá a irse con los lavados.
Tintas: Especiales para estampar en tela, las venden en tiendas de bricolaje.
Sellos: Podemos utilizar tanto
sellos comerciales como tallados a mano, frutas o utensilios, la imaginación no tiene límites.
Herramientas: Pinceles, cutter para recortar, goma de borrar, lápices para copiar el diseño, rotulador para marcar.
Proceso:
Lavar la tela: Esto es muy
importante ya que las telas vienen de fábrica impregnadas con sustancias que
les dan apresto al tejido y las impermeabilizan por lo que la tinta no
agarraría bien y se iría al lavarla.
Estampar el motivo: Cargamos de tinta el sello que vamos a utilizar y lo
estampamos sobre el tejido. Es interesante probar la presión y la cantidad de
tinta que ponemos en un trozo de tela de muestra antes de hacerlo, para ver cómo nos gusta más. Para que el estampado sea
nítido tenemos que ejercer más presión que sobre el papel e intentar hacerlo de
manera uniforme.
Fijar con calor: Una vez seco, colocamos un paño sobre
el trozo de tela estampada y le pasamos la plancha sin utilizar el vapor, a
temperatura media, durante unos 3 minutos.
Varios ejemplos:
Crear tus sellos a partir de una goma de
borrar. Nos lo ofrecen a través de la página de Etsy.com. Parece bastante sencillo, os a animamos a probarlo.
Trazar el diseño con lápiz. |
Pasarlo a la goma calcándolo. |
Pon un poco de tinta y estampa en papel para probar. |
Sí te suena complicado compra los sellos ya hechos.
O con sencillos materiales que puedes encontrar por casa.
Con una manzana
Con un cuchillo afilado corta la manzana por la mitad de
arriba a abajo, manteniendo intacto el tallo.
Con el pincel aplica una cantidad generosa de la
pintura elegida sobre una mitad de la manzana. No te olvides de pintar también
el tallo.
Coloca papel, periódico o cartón debajo de la zona que vas
imprimir.
Presiona la manzana firmemente sobre la tela. Retírala
cuidadosamente.
Vuelve a aplicar pintura a la manzana y repite la operación
de acuerdo al patrón elegido.
Con patata
Lava la patata y corta una rodaja gruesa. Introduce un molde cortante para galletas presionando bien para que el sello de patata quede
perfectamente cortado.
Rollo de papel higiénico
Pon pintura en un plato llano, un cartón debajo de la tela para que no cale la superficie y ve empapando el rollo y estampándolo, así de fácil.
Plástico de burbujas
Y por ultimo, utilizamos una técnica de impresión divertida y sencilla.
Aplicamos una capa de espesor medio de pintura sobre el plástico de burbujas utilizando una
brocha gorda. Una vez que hallamos cubierto un área lo
suficientemente grande para lo que quieras estampar, le damos vuelta pintado sobre la tela. Presiona suavemente para conseguir que la pintura se adhiera o pones algo de peso como un libro ayudando a aplicar una presión
uniforme. Con mucho cuidado se aparta el plástico de burbujas y
voilá.