Las fiestas populares expresan la forma de ser
y sentir de un pueblo.
En San Sebastián (Guipuzcoa) el 20 de enero celebran la fiesta grande de la
ciudad. No está claro, pero al parecer tiene su origen en la peste de 1597 y en la devoción que la ciudad le profesa al santo por su ayuda a
superar este trance así como por hechos militares que acontecieron
en la época napoleónica.
La fiesta comienza a las 12 de la noche en la plaza
de la Constitución (parte vieja donostiarra) con la izada de la
bandera ante las autoridades municipales al son de la
tamborrada.
La sociedad gastronómica Gaztelubide después
de una gran cena en su sociedad, tiene el honor desde hace muchos
años de ser la encargada de hacer sonar los tambores en la izada
con más tradición en Donostia.
Al medio día los niños se convierten en los protagonistas indiscutibles de la fiesta, 700 niños de distintos colegios de San
Sebastián se citan en el ayuntamiento de la ciudad para después de
los cañonazos de rigor comenzar un espectacular desfile por las principales
arterias de la ciudad haciendo sonar sus tambores y barriles
al son de la música del maestro Sarriegui mientras lucen los distintos uniformes de
estilo napoleónico.
Durante 24 horas la ciudad es una fiesta de tambores y barriles, en todos los barrios se pueden escuchar. A las 24:00 horas la Tamborrada Unión Artesana será la encargada de arriar la bandera y dar por finalizada la fiesta.