Sólo necesitaréis algún palet de embalaje para dar una nueva vida a un
material que abunda como desecho y que tiene infinitas posibilidades.
Su facilidad de manejo y estructura modular permite, además, a particulares
elaborar sus propios muebles sin grandes conocimientos de ebanistería. Aquí
hemos recopilado algunos ejemplos, hay versiones para todos los gustos:
Con uno o varios palets podéis hacer mesas
bajas, pintadas o sin pintar, con cristal o sin cristal, compráis cuatro ruedas en una
ferretería y..así de fácil.
Ahora con seis palets. Coger seis palets en muy buen estado, lijarlos, ponerles un tapaporos y
pintarlos de blanco, apilándolos para formar un sofá en L. Sobre esos
palets, cortar varios trozos de goma espuma,
amoldándolo a la forma que tiene con respecto al respaldo,
sólo uno de los lados lo tiene, mientras que en el otro queda al aire,
con un cojín en el extremo para dar algo de apoyo en lo que sería la chaise-longue.
Por último, tapizar mediante una funda de tela, tomar las medidas y ponerles unos 4 cm más por cada
lado para poder coser con facilidad y que os quede perfecto el sofá. Ganaréis una estupenda zona de almacenamiento extra para libros o revistas bajo el sofá, usando el estante que queda al apilar dos palets.
Otra idea para la terraza.
