Qué ver en Estrasburgo capital de Alsacia, mitad francesa, mitad alemana, situada en la zona del bajo Rhin. Es la sede oficial del parlamento europeo y su centro histórico fue el primero en ser declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
En un día se puede visitar haciendo un recorrido por la ciudad. Empezaremos por el centro histórico de la ciudad llamado la Gran Isla, es como una islita en el río, visitando la Catedral de Notre Dame de estilo gótico tardío.
En el interior su reloj astronómico marca la eternidad. Es una computadora astronómica que se pone en funcionamiento a las 12.30 horas, previamente a las 12 horas se proyecta una película sobre el reloj.
El espectáculo no sólo sorprende por su ingenio, conmueve por su simbolismo sobre el paso del tiempo; subimos al torreón para admirar la ciudad desde arriba. Al salir sobre la Place du Chateau, visitaremos el Musée de l'Oeuvre de la catedral.
Al lado de la oficina de turismo esta la casa Kammerzell, del siglo XVI, hoy hotel-restaurante con las arcadas más antiguas de la ciudad, un lugar excepcional con sus techos abovedados, sus 75 ventanas rodeadas de esculturas sacras y profanas que se encienden cada noche y un ambiente típicamente medieval. Con frescos alegóricos que adornan las paredes, un buen lugar para reservar para comer o para alojarse.
A la izquierda de la Plaza se encuentra el Palais des Rohan, antigua residencia de los príncipes-obispos, elegante palacio del siglo XVIII que alberga tres museos, el Museo Arqueológico, el de Bellas Artes y el de Artes Decorativas, la entrada cuesta 5€.
Continuando nuestro descubrimiento de la ciudad antigua, tomamos por la rue des Freres hacia el Marché Gayot y seguimos hasta encontrar el Muelle de los Pescadores o Quai des Pecheurs, lo cual nos brindará un paseo agradable a orillas del río L'Ille y la posibilidad de admirar hermosos edificios antiguos.
Pasando el Pont du Corbeau, famoso por ser el puente desde donde se arrojaban en jaulas a los infanticidas, llegamos al Musée Alsacien, museo de la cultura popular que nos cuenta la historia de la región a través de sus vestimentas, mobiliarios, objetos y utensilios de la vida diaria. 23 quai Saint Nicolás. Abierto de 12 a 18h todos los días menos martes y sábados y los domingos de 10 a 18h.
Un poco más lejos, tomando por el Pont Saint Thomas llegamos hasta la Église de Saint Thomas, protestante, en su interior se encuentra el mausoleo del Mariscal de Saxe, es un ejemplo interesante del arte funerario barroco, luego de visitarla podemos terminar nuestro recorrido en la Place Gütenberg, el inventor de la imprenta vivió en Estrasburgo y tiene una estatua conmemorativa en esta plaza.
Por la prolongación de la rue des Grandes Arcades llegamos a la Place Kléber donde se levanta la estatua de uno de los hijos pródigos de la ciudad, comandante de Napoleón y encargado de compendiar en un sólo tomo, todos los descubrimientos arqueológicos e históricos de Egipto.
Continuando por la rue de l'Outre llegamos a la Place de Broglie, donde se encuentran el Teatro de Estrasburgo, el Hotel de Ville y el ayuntamiento.
El barrio de la Petite Francia. Originariamente era un barrio de pescadores, es una verdadera delicia pasear por los canales con casas del siglo XVI y XVII talladas en madera y cuajadas de flores.
En esta zona vivían distintos artesanos como curtidores de pieles y molineros, en estas bonitas casas con tejados inclinados de pizarra, es como transportarse al escenario de un cuento de hadas. La mejor manera de conocerlo es comenzando nuestro recorrido en la Place Henry Dunant, desde allí nos dirigimos hacia el norte para llegar hasta los Ponts Couverts, a pesar de no estar cubiertos en la actualidad, persisten el nombre y las torres del siglo XIV.
Justo atrás veremos el Barrage Vauban o Gran Exclusa, antigua represa que permitía inundar la zona para entorpecer el ataque a la ciudad por el agua, data del año 1690, hay una terraza de acceso libre que nos permite tener una vista panorámica increíble de la ciudad antigua. (¡No olvidar la cámara de fotos!) y sí el tiempo nos acompaña, nada como tomar el Batorama y ver todo desde el agua.
.JPG)
Barrio Alemán, el barrio que quiso y no pudo. Construido por los alemanes con la intención de convertirlo en la "city" de la ciudad, con todos los organismos administrativos instalados allí, se construyeron numerosos edificios de estilo gótico renacentista impresionantes, tales como la Universidad, parques sorprendentes como el Jardín Botánico y largas avenidas. Lo ideal es partir desde el Parc de la Citadelle y deambular hasta terminar descansando en el Jardín Botánico.
Atravesando el puente sobre el río L'Ille justo enfrente de la Universidad, obtenemos una hermosa vista de la Église de Saint Paul.
Siguiendo en la misma dirección, tomamos la Avenue de la Liberté para llegar a la Place de la République, una plaza que alberga numerosos monumentos y en sus alrededores se encuentra la Biblioteca Nacional, el Teatro Nacional y el Palais du Rin.
El barrio de las instituciones europeas, Consejo de Europa, Palacio de los Derechos Humanos, Parlamento Europeo. Comenzar el recorrido en la Allée des Droits de l'Homme para llegar al palacio del mismo nombre Palais des Droits de l'Homme ("Derechos del Hombre"), imposible no verlo, es una construcción ultra moderna que llama inevitablemente la atención.
.bmp)
En la orilla opuesta del río L'Ille se encuentra el Parlament Européen (Parlamento Europeo). El Palacio de l´Europe es sede del Consejo de Europa. La Asamblea parlamentaria del consejo de Europa se reúne varias veces al año en este palacio. El Consejo de Europa es una organización de carácter internacional y de ámbito regional que promueve la cooperación de los estados de Europa en un marco jurídico y político común basándose en la democracia, los derechos humanos y el estado de derecho.
Por último, descansar en el Parc de l'Orangerie que es el parque más grande de Estrasburgo, donde hay un precioso lago y un pequeño zoológico con especies exóticas de aves y mamíferos.
Por situación y precio el hotel Cour Du Corbeau en 6-8 rue des Couples, está muy bien. Este hotel de 4 estrellas está ubicado en un edificio reformado del siglo XVI en el centro de Estrasburgo, sirve un desayuno bufé todas las mañanas. En el salón de té podrá degustar una selección de galletas y en el bar o la terraza podrá disfrutar de una copa. La Catedral de Estrasburgo se encuentra a 550 metros del hotel Cour Du Corbeau y la Place Kléber está a 10 minutos a pie. La parada de tranvía Porte de l’Hopital está a 350 metros.
Para comer en la parte histórica y en el barrio Petite France, nos encontramos las brasseries y los winstubs, pequeños restaurantes típicamente alsacianos.
A las fueras de Estrasburgo podemos visitar el Castillo Haut-Koenigsbourg que es verdaderamente espectacular. Está bellamente restaurado y las vistas de las llanuras circundantes de Alsacia son impresionantes, incluso podríamos ver la Selva Negra de Alemania al este y los Alpes suizos en el sur. Después, visitamos el pintoresco pueblo de Riquewihr, zona de vinos donde podremos catarlos en sus bodegas.
En Ungersheim, se encuentra el Ecomusée de Alsacia, un museo al aire libre con reconstrucciones de época y artesanos realizando sus labores para solaz de los visitantes. Abierto en julio y agosto de 9.30 a 19h y el resto del año de 10 a 18h. Entrada adultos 9,50€.
Nota: El Strasbourg Pass brinda un pasaporte que incluye: un museo a elección, ingreso a la plataforma de la Catedral, un paseo en barco, medio día de bicicleta y el espectáculo del Reloj Astronómico. Tiene una validez de tres días y cuesta 14€ adultos y 7€ niños. Todos los museos de la ciudad son gratuitos para los menores de 18 años y de entrada libre el primer domingo de cada mes.